Con un gran despliegue de medios,
prensa, televisión y redes sociales, nos
fue anunciada la creación de la “Tarjeta del Mayor” como algo muy importante
para nuestro beneficio. Nos ilusionaron y …
No dudo que se pueda mejorar, y que lo pretendan
pero, como en tantas ocasiones, los políticos han vendido la piel del oso antes
de cazarlo.
En funciones desde el 1 de junio, no fue
hasta el dia 6 cuando presentaron el anunciado catalogo de prestaciones, con
unos descuentos básicos de 5 y 10 % en: 4 ortopedias, 4 centros auditivos, 3
ópticas, 1 centro de día, 3 dentistas, un fotógrafo de reportajes y 2
funerarias. Aunque esto me lleva a preguntarme: ¿es válida la tarjeta después
de muerto?
Posteriormente en fecha 28/06 han ampliado una perfumería con
descuento del 30% en perfumes caros.
Sinceramente, tal como lo han hecho, han creado la “Tarjeta del Mayor, Enfermito”, demostrando
una vez más esa falta de contacto entre administración y administrados.
Señores políticos, los mayores además de
ir al médico, nos compramos: ropa, zapatos, complementos, libros y discos,
tinta para impresoras, paraguas, sombreros, flores, perfumes y cosas de aseo;
comida y algún que otro licor puntualmente, (para resfriados claro). Y, aunque
parezca inapropiado, también compramos juguetes, cunas y hasta carritos de
bebe.
Nos gusta ir a espectáculos,
musicales, salas de baile, repostamos coches, cubrimos seguros de casa y vehículo,
vamos a comer fuera alguna que otra vez. En apuros cogemos taxis, y no tenernos
ningún descuento en el metro si lo utilizas poco.
Y montones de cosas más
a poco que se piense. Pero la clave está ahí, en pensar por y para el
jubilado real.
Yo, todo esto de las tarjetas del mayor, ofertas a jubilados, etc. me parece una memez. Viniendo de los políticos, en mi oopinión, es un intento de acercar votos; piensan que por ser jubilados somos moldeables como la plastilina. No tienen ni idea, estamos de vuelta de muchas cosas y no entienden que nos hemos graduado, con nota, en la universidad de la vida.
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