Siempre me fascinó, desde mi mas tierna infancia, colgado en el muro del atrio de la Iglesia de El Patriarca.
Mi abuela paterna, Rita, encantadora cuenta cuentos me
sentaba en su regazo contándome aquella maravillosa historia de un gran
cocodrilo que vivía entre los cañaverales de la desembocadura del Guadalaviar, después
Turia, que emitía lloros como un niño y que atraían a los viandantes a una
muerte segura entre sus fauces, causando una gran mortaldad y espanto en la
población.
En la versión de mi abuela era un condenado a muerte quien a cambio de
su libertad accedió a luchar con él, fabricándose un traje de espejos que
deslumbró a la fiera por un instante, lo que aprovechó para matarlo de una certera
lanzada.
He leído en internet
variedad de versiones muy parecidas, donde el matador es un noble aguerrido, un
forastero milagroso, un lozano caballero, etc. etc. prácticamente la misma
historia. Solamente me llama la atención
una versión que lo sitúa en el año 1957 con la riada de Valencia. Por favor,
yo tenía 13 años, y el caimán, que no cocodrilo ni dragon, murió en 1606.
Bueno siendo muy bonito el
cuento, la verdad documentada es que siendo arzobispo de Valencia San Juan de
Ribera, Patriarca de Antioquía por Pio V, y Virrey y Capitán General, Canciller
de la Universidad y Justicia Mayor de Valencia, por Felipe III, a su llegada a
Valencia en 1568 recibió el regalo de un bebe-caimán, que le mandó el virrey
del Perú, y al que le puso el nombre de “Lepanto” según los escritos, éste que fue creciendo en
los jardines de su casa en la calle Alboraia, falleciendo sin haber hecho mal a
nadie el 7 de junio de 1606.
San Juan de Ribera ordenó
que una vez embalsamado se colgara en el atrio de la Iglesia para recordar a
los visitantes el respetuoso silencio, y el recogimiento con el que se debe
estar en ella.
Y en septiembre: Se alguien que oye bien. Solo cuando escuchas bien obtendrás ideas nuevas, diferentes a las que tienes.
Como tú bien dices hay miles de versiones sobre está historia, hasta la he oido en algunas ciudades de fuera de España.
ResponderEliminarUn saludo