El envejecimiento es una etapa de la vida por la que todos vamos a pasar y en la que ocurren fenómenos complejos que abarcan desde cambios moleculares, celulares, fisiológicos y psicológicos; por ello hay que tener en cuenta distintos aspectos que tal vez no realizamos durante nuestra juventud, como cambios en la alimentación y ciertos hábitos saludables.
Es de vital importancia considerar que las personas mayores de 60 años tienen mayor riesgo de padecer otras enfermedades y que deberán prevenir promoviendo el consumo de alimentos específicos.
Según Cecilia Solis-Rosas, endocrinóloga y miembro del consejo de nutrición de Herbalife, se debe considerar lo siguiente:
- Proteínas de alto valor biológico, como la leche y derivados, carnes magras, pescado, soya.
- Vitaminas, minerales, antioxidantes que las encontramos mayormente en las verduras y frutas, pondremos como ejemplo a la zanahoria y tomate por su riqueza en vitamina A. Frutas fresca como fresa, kiwi, melón por su riqueza en vitamina C.
- Carbohidratos, como los cereales de preferencia integrales por su riqueza y como fuente de energía
- Fibra para facilitar la motilidad gastrointestinal y prevenir enfermedades digestivas y determinados tipos de cáncer. La encontramos en la verdura, fruta con cascara, semillas como la linaza, chía, avena, frutos secos.
- Promover el consumo de agua, de 6 a 8 vasos al día, para mantener la hidratación adecuada.
- Una alimentación baja en grasa y sal.
- Un ambiente agradable a la hora de tomar los alimentos.
- Promover la actividad física diaria de acuerdo a la edad y capacidad física.
- Rodearse de entornos saludables para evitar el aislamiento que es causa muy frecuente de depresión, aburrimiento, aislamiento social y que a esta edad disminuyen el apetito de manera importante.
- Restringir el consumo de alcohol, tabaco, sal, azucares refinados y grasas no saludables.
Una buena alimentación es fundamental en cada una de las etapas de nuestra vida, según Solis- Rosas, y que nunca debemos olvidar que estas cambian a medida que pasan los años. Ayudemos al adulto mayor que vive en nuestro hogar a crear buenos hábitos alimenticios y nunca dejemos de lado el apoyo familiar para garantizar una vida saludable, elevando además su autoestima.
Resumiendo, te pasan por las narices todo lo bueno y te dicen que de esto no puedes comer.
ResponderEliminarPor supuesto hay que seguir unas pautas, por ejemplo comer carnes ligeras como el ciervo, la liebre, incluso el jabalí que también corre mucho. Reemplazar los vasos de agua por vino y cerveza que también es líquido, así seguiría con sustitutos más agradables.
Tu y yo nos entendemos. Me encantan tus recomendaciones. El problema es ese dichoso espejo que tengo de perfil, al salir de la ducha. Cachis la.
EliminarEstá muy bien que las personas mayores vigilen su alimentación, que sea sana y saludable, pero las muy estrictas en ese aspecto terminan con alzheimer, pues al cerebro no se le puede privar de ciertos nutrientes y alimentos.
ResponderEliminarUn saludo.
Nunca hay que caer en el error de suprimir alimentos básicos en pro de otros.
EliminarGracias por tan valiosa información. Aunque yo añadiría algo que para mí es fundamental: dos "plantas" muy saludables; que son: el áloe vera (yo tomo 60 ml. diarios, en dos tomas) y la planta de los pies (andando por lo menos una hora diaria).
ResponderEliminarUn abrazo, JMF
Tu segunda opción imprescindible. El andar es lo mejor que se puede hacer de mayores. Andar es una maravilla para aumentar la movilidad, engrasar las articulaciones y mejorar el corazon.. Para esto sirve hasta el andar despacito viendo escaparates. Pero no confundir con querer reducir volumen. Alguien me explico que no hay perdida de peso sin sudar.
Eliminar