Una de
cada tres personas mayores han ayudado por primera vez a algún familiar en los
últimos dos años
El apoyo de las personas mayores constituye un pilar
de contención imprescindible para paliar el impacto social de la crisis sobre
su entorno familiar.
Bajo el título “El impacto de la crisis en las
personas mayores”, el presidente de la Cruz Roja en Cataluña, Josep Marquès, durante
la III ConferenciaTécnica de Crisis de la Cruz Roja en Cataluña, ha presentado
un estudio del Observatorio de Vulnerabilidad .Una de las principales
conclusiones del mismo es que se están invirtiendo los flujos de solidaridad intergeneracional
propios del Estado del Bienestar, siendo ahora
cada vez más las personas mayores las que apoyan a las generaciones más
jóvenes. Del total de personas encuestadas, un 20% presta ayuda económica a sus
hijos, un 10% les proporcionan ayuda alimentaria y un 6,5% ha acogido a algún
familiar en casa. Por eso, cualquier medida o política pública referente a las
personas mayores también puede tener repercusiones sobre el resto de la red
familiar y social.
El impacto de la crisis económica tiene consecuencias
sobre la alimentación, puesto que, a pesar de que un 78,2% del total de
personas encuestadas sigue una alimentación variada, el 19% no puede comprar
con regularidad ni pescado ni carne. Además, en el caso del Grupo de Pobreza,
la mitad no puede comprar habitualmente fruta, verdura o lácteos. Un 30% no
puede ir al dentista o a revisarse la vista, porcentajes que se elevan por
encima del 50% entre los beneficiarios de los proyectos de lucha contra la
pobreza.
Del conjunto de
personas encuestadas, un 25% no pueden mantener su hogar a una temperatura
adecuada (un 54,3% en el Grupo de Pobreza). En estas circunstancias, la mayoría
de personas encuestadas, hasta el 80%, tampoco pueden permitirse ningún gasto
en ocio y descanso.
Las personas mayores perciben que, a consecuencia de
la ruptura del progreso social y el deterioro del Estado del Bienestar, sus
hijos y nietos vivirán peor que ellos.
Fuente: CRUZ ROJA ESPAÑOLA
Cierto, yo también pienso que nuestros hijos acabarán viviendo peor que nosotros, me parece muy triste. Y lo peor es que no puedo evitar el pensar que podríamos tener alguna responsabilidad en lo que ha ocurrido, claro que eso es lo que los gobernantes quieren, repartir la culpa.
ResponderEliminarQue triste!!!