viernes, 27 de abril de 2018

ALBORES DE LA AVIACION



Voy a compartir con vosotros unas notas manuscritas fechadas en febrero de 1924, parece ser de un piloto o interesado en los aviones, no esta completo ni de entrada ni de fin, describiendo algo así, como la primera vez que  se encuentra ante un avión que no es  de madera. Sus explicaciones no son nada técnicas ni habla de marcas o datos que nos orienten, pero está fascinado describiéndolo

 Lo transcribo:

“Sobre el terraplén, elevábase un cobertizo a unos quince metros de altura, ocupando una superficie de quinientos metros cuadrados próximamente. (no le llama hangar). Este cobertizo estaba construido todo el con delgadas hojas de hierro, y unas puertas correderas,  del mismo metal, permitían dejar franca una abertura de cincuenta metros de ancho. Allí era donde reposaba el aeroplano.

Enfrente, el aparato, verdaderamente enorme. Toda la construcción era metálica. En medio, entre las dos alas del volador, estaba la navecilla, que se parecía bastante al cuerpo de un pájaro. Allí era donde se colocaban la tripulación y los pasajeros.

Esta navecilla estaba hecha de tubos de acero, recubiertos de placas ligeras de aluminio. En el interior se encontraba el motor, una maravilla, construido sobre el principio de las turbinas, con una potencia de  mil quinientos caballos y un peso de mil quilos solamente, o sea, próximamente, dos tercios de kilo por cada caballo.

Era en verdad, la realización del máximum de fuerza con el mínimum de peso.

Un asiento situado ante el motor, permitía al piloto dirigir el aparato por medio de volantes  de madera que hacia accionar gobernalles verticales y horizontales.

En la popa de la navecilla, se encontraban dos pares de hélices de acero, que jugaban en sentido inverso y servían para la propulsión del aparato. Después, a distancia, soportado por un bastidor de tubo, bastidor fuertemente amarrado, extendíase una superficie plana, que representaba con bastante perfección la cola de un pájaro.

En la parte superior, un gobernalle vertical aseguraba la dirección del vehículo, mientras que un segundo plano móvil fijado a la cola del pájaro, servía para gobernalle horizontal y permitía los movimientos de elevación y descenso.

Todas estas superficies planas, así como los gobernalles y las alas del volador, estaban igual que la navecilla construidas de tubos de acero, recubiertos de placas de aluminio.
Gracias a esta nueva construcción, el aparato, en caso de lluvia, no era molestado ni entorpecido lo mas mínimo; el agua se deslizaba sobre las superficies metálicas, lo que no podía suceder en las construcciones de  madera o de tela.

Este aeroplano era de una maquina monoplano; es decir, de un solo plano, en oposición a los aeroplanos biplanos o triplanos que tienen dos o tres planos superpuestos,

Los aeroplanos monoplanos pueden realizar, en efecto, velocidades mucho mayores que los biplanos o triplanos.

El aparato completo representaba una superficie de doscientos metros cuadrados, con un peso de dos mil quinientos kilos y podía elevar un peso de mas de cuatro mil quilos.

Así, pues, el exceso que podía  elevar sobre su propio peso era de mil quinientos. Estaba capacitado para llevar ocho personas; el peso de cada uno estaba calculado en 80 kilos, lo que hacen un total de quinientos sesenta kilos, quedando aun un millar de kilos para las provisiones de boca, así como el combustible necesario para la alimentación del motor.

El aeroplano tenía una velocidad máxima de doscientos kilómetros/hora a un altura de 250 metros,

Una de sus particularidades interesantes era la deformación automática de las alas que aseguraban un equilibrio admirable, cualesquiera que fuesen las ráfagas de viento la rapidez de las vueltas

Añadamos a todo lo dicho que el aeroplano estaba montado sobre tres fuertes ruedas forradas de caucho que le eran imprescindibles en tierra para tomar impulso,

Y hasta aquí, se corta el manuscrito, original o copiado.  Me encantaría pensar se trata de algún familiar perdido en la historia.
(También´ me ha llamado la atención que dice "próximamente", en lugar de aproximadamente).

22 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Sin duda el tema le apasionaba. No sabía que le iban a leer 98 años despues.

      Eliminar
  2. La aviación tiene una historia tan curiosa como apasionente, gracias, Marcos, por reflejar parte de ella.
    Saludos afectuosos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ha sido un encuentro fortuito, y escrito a plumilla.

      Eliminar
  3. Es muy curioso, por una parte habla de demasiados datos técnicos, con todo lujo de detalles, potencia del motor, peso, empuje, superficie alar, materiales de construcción, etc...
    Y sin embargo hay otros detalles, pocos en realidad, de los que realmente parece un profano en la materia.
    O era un periodista que le habían dado unas notas para que entendiera de que iba ese aeroplano, o era un alumno de piloto que le estaban enseñando a volar este avión habiendo pilotado ya modelos bi o triplanos y lógicamente se empieza por datos técnicos ¿?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mi chocan muchas cosas, habla de hélices de acero, no de madera, y en la popa. No he encontrado ninguna imagen de un avión de dos hélices en la popa. Y ap`laude que al ser de aluminio no moja la lluvia la lona o madera. A saber.

      Eliminar
    2. Aviones antiguos de un motor en popa encuentro alguno, pero de dos no he encontrado ninguno. Igual es que no llegó a volar por tener algún tipo de problema.

      Eliminar
  4. Un tanto entrañable entre datos y cantidades, ¿un padre, un hijo orgulloso?. No importa, el relato merece la pena. Abrazos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo que me ha gustado es que hace cuatro dias, y ya nos suena extraño. Que contaría si viera la cabina de un reactor.

      Eliminar
  5. Joder hasta a los expertos en la materia, seguro que esta entrada sobre este aparato les va a sorprender.

    Abrazo Marcos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Rafa y que narices tenían para subirse a éstos engendros.

      Eliminar
  6. Muy curioso e interesante.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  7. Creo que habría que situar ese escrito a principio del siglo XX, cuando la aviación era incipiente.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  8. Un documento muy valioso para la historia de la aviación. Al rato nos vamos a transportar con la mente en un tris, a como vamos... o quizá ya no iremos a ninguna parte con lo que están creando en lo referente a inteligencia artificial.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A final de siglo no puedo aventurar que verán mis nietos, pero ya no me importará.

      Eliminar
  9. qué buen manuscrito, no debía pasar desapercibido contemplar estos "bichos" por primera vez.
    Si hasta hoy en día nos sorprende que estén ahí, dando vueltas

    Hoy nos puede suceder lo mismo con algunas naves espaciales que aún son prototipos (o incluso hace poco me ha sorprendido toparme con un dron de una espectacular tecnología)

    Abrazo!

    ResponderEliminar
  10. Curioso relato, sin duda interesado vivamente por el tema. Abrazos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Desde el primer vuelo en 1907 era el tema que acaparaba toda la actualidad, y cada año surgían nuevas mejoras y probaturas.

      Eliminar

Siéntete libre de expresar tu comentario en este blog.
Todas las opiniones serán bien recibidas siempre y cuando se redacten desde el respeto pues este solo pretende ser un foro donde compartamos experiencias para mejorar nuestro tiempo de jubilación.
Gracias por entenderlo y participar.