Voy a compartir con vosotros
unas notas manuscritas fechadas en febrero de 1924, parece ser de un piloto o
interesado en los aviones, no esta completo ni de entrada ni de fin, describiendo
algo así, como la primera vez que se encuentra
ante un avión que no es de madera. Sus
explicaciones no son nada técnicas ni habla de marcas o datos que nos orienten,
pero está fascinado describiéndolo
Lo transcribo:
“Sobre el terraplén, elevábase
un cobertizo a unos quince metros de altura, ocupando una superficie de
quinientos metros cuadrados próximamente. (no le llama hangar). Este cobertizo
estaba construido todo el con delgadas hojas de hierro, y unas puertas
correderas, del mismo metal, permitían
dejar franca una abertura de cincuenta metros de ancho. Allí era donde reposaba
el aeroplano.
Enfrente, el aparato, verdaderamente
enorme. Toda la construcción era metálica. En medio, entre las dos alas del
volador, estaba la navecilla, que se parecía bastante al cuerpo de un pájaro.
Allí era donde se colocaban la tripulación y los pasajeros.
Esta navecilla estaba hecha
de tubos de acero, recubiertos de placas ligeras de aluminio. En el interior se
encontraba el motor, una maravilla, construido sobre el principio de las
turbinas, con una potencia de mil
quinientos caballos y un peso de mil quilos solamente, o sea, próximamente, dos
tercios de kilo por cada caballo.
Era en verdad, la
realización del máximum de fuerza con el mínimum de peso.
Un asiento situado ante el
motor, permitía al piloto dirigir el aparato por medio de volantes de madera que hacia accionar gobernalles verticales y horizontales.
En la popa de la navecilla,
se encontraban dos pares de hélices de acero, que jugaban en sentido inverso y
servían para la propulsión del aparato. Después, a distancia, soportado por un
bastidor de tubo, bastidor fuertemente amarrado, extendíase una superficie
plana, que representaba con bastante perfección la cola de un pájaro.
En la parte superior, un
gobernalle vertical aseguraba la dirección del vehículo, mientras que un
segundo plano móvil fijado a la cola del pájaro, servía para gobernalle horizontal
y permitía los movimientos de elevación y descenso.
Todas estas superficies
planas, así como los gobernalles y las alas del volador, estaban igual que la
navecilla construidas de tubos de acero, recubiertos de placas de aluminio.
Gracias a esta nueva
construcción, el aparato, en caso de lluvia, no era molestado ni entorpecido lo
mas mínimo; el agua se deslizaba sobre las superficies metálicas, lo que no podía
suceder en las construcciones de madera
o de tela.
Este aeroplano era de una
maquina monoplano; es decir, de un solo plano, en oposición a los aeroplanos
biplanos o triplanos que tienen dos o tres planos superpuestos,
Los aeroplanos monoplanos
pueden realizar, en efecto, velocidades mucho mayores que los biplanos o
triplanos.
El aparato completo representaba
una superficie de doscientos metros cuadrados, con un peso de dos mil quinientos
kilos y podía elevar un peso de mas de cuatro mil quilos.
Así, pues, el exceso que
podía elevar sobre su propio peso era de
mil quinientos. Estaba capacitado para llevar ocho personas; el peso de cada
uno estaba calculado en 80 kilos, lo que hacen un total de quinientos sesenta
kilos, quedando aun un millar de kilos para las provisiones de boca, así como
el combustible necesario para la alimentación del motor.
El aeroplano tenía una
velocidad máxima de doscientos kilómetros/hora a un altura de 250 metros,
Una de sus particularidades interesantes
era la deformación automática de las alas que aseguraban un equilibrio
admirable, cualesquiera que fuesen las ráfagas de viento la rapidez de las
vueltas
Añadamos a todo lo dicho que
el aeroplano estaba montado sobre tres fuertes ruedas forradas de caucho que le
eran imprescindibles en tierra para tomar impulso,
Y hasta aquí, se corta el manuscrito,
original o copiado. Me encantaría pensar
se trata de algún familiar perdido en la historia.
(También´ me ha llamado la atención que dice "próximamente", en lugar de aproximadamente).
(También´ me ha llamado la atención que dice "próximamente", en lugar de aproximadamente).
Cuánta pasión...
ResponderEliminarUn abrazo
Sin duda el tema le apasionaba. No sabía que le iban a leer 98 años despues.
EliminarPerdón, 94 años.
EliminarLa aviación tiene una historia tan curiosa como apasionente, gracias, Marcos, por reflejar parte de ella.
ResponderEliminarSaludos afectuosos.
Ha sido un encuentro fortuito, y escrito a plumilla.
EliminarEs muy curioso, por una parte habla de demasiados datos técnicos, con todo lujo de detalles, potencia del motor, peso, empuje, superficie alar, materiales de construcción, etc...
ResponderEliminarY sin embargo hay otros detalles, pocos en realidad, de los que realmente parece un profano en la materia.
O era un periodista que le habían dado unas notas para que entendiera de que iba ese aeroplano, o era un alumno de piloto que le estaban enseñando a volar este avión habiendo pilotado ya modelos bi o triplanos y lógicamente se empieza por datos técnicos ¿?
A mi chocan muchas cosas, habla de hélices de acero, no de madera, y en la popa. No he encontrado ninguna imagen de un avión de dos hélices en la popa. Y ap`laude que al ser de aluminio no moja la lluvia la lona o madera. A saber.
EliminarAviones antiguos de un motor en popa encuentro alguno, pero de dos no he encontrado ninguno. Igual es que no llegó a volar por tener algún tipo de problema.
EliminarUn tanto entrañable entre datos y cantidades, ¿un padre, un hijo orgulloso?. No importa, el relato merece la pena. Abrazos
ResponderEliminarLo que me ha gustado es que hace cuatro dias, y ya nos suena extraño. Que contaría si viera la cabina de un reactor.
EliminarJoder hasta a los expertos en la materia, seguro que esta entrada sobre este aparato les va a sorprender.
ResponderEliminarAbrazo Marcos.
Rafa y que narices tenían para subirse a éstos engendros.
EliminarMuy curioso e interesante.
ResponderEliminarUn abrazo.
La pasión por volar como pájaros.
EliminarCreo que habría que situar ese escrito a principio del siglo XX, cuando la aviación era incipiente.
ResponderEliminarUn abrazo.
Lleva fecha de 20 de febrero de 1924
EliminarUn documento muy valioso para la historia de la aviación. Al rato nos vamos a transportar con la mente en un tris, a como vamos... o quizá ya no iremos a ninguna parte con lo que están creando en lo referente a inteligencia artificial.
ResponderEliminarUn abrazo.
A final de siglo no puedo aventurar que verán mis nietos, pero ya no me importará.
Eliminarqué buen manuscrito, no debía pasar desapercibido contemplar estos "bichos" por primera vez.
ResponderEliminarSi hasta hoy en día nos sorprende que estén ahí, dando vueltas
Hoy nos puede suceder lo mismo con algunas naves espaciales que aún son prototipos (o incluso hace poco me ha sorprendido toparme con un dron de una espectacular tecnología)
Abrazo!
Desde luego el volar era todo un reto desde Icaro.
EliminarCurioso relato, sin duda interesado vivamente por el tema. Abrazos
ResponderEliminarDesde el primer vuelo en 1907 era el tema que acaparaba toda la actualidad, y cada año surgían nuevas mejoras y probaturas.
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