NO ABRAS LA PUERTA

No pretendo asustar a nadie, pero sí advertiros que hay que estar prevenidos y desconfiar de quien llama a tu puerta, si no estas acompañado/a de algún hijo o familiar más joven.

Tu casa es tu territorio y es inviolable. Solo tienes obligación de abrirla ante la presencia de una autoridad debidamente documentada. Y por supuesto nunca ante amenazas  que  van a cortar la luz, el agua, o el gas, porque este no es el proceder de los operarios que sí realizan gestiones de estos organismos. Si te amenazan no te lo pienses, continua con la puerta cerrada y llama al 091 o  012 contándoselo.

Os cuento lo ocurrido a un matrimonio familiar mío el pasado dos de marzo:

Llegaba el esposo a casa y fue abordado en el patio por un señor de unos 40 años, muy bien trajeado, y muy educado que le dijo que era inspector de Iberdrola y que solo quería molestarle dos minutos para verificar que unas variaciones de tensión no le habían perjudicado el disyuntor de corriente en su casa. Les abrió la esposa la puerta, y con mucha habladuría de, señora por aquí, y señora por allá, les dijo que se quedaran junto al disyuntor, (que suele estar en la entrada de la vivienda), y lo subieran y lo bajaran a su orden, mientra verificaba el funcionamiento del alumbrado; sin dejarles tiempo a reaccionar, con gran decisión se metió para dentro de la casa, encendiendo y apagando todos lo interruptores cuarto por cuarto, mientras les gritaba “enciendan”, “apaguen”, repetidas veces. En un minuto ya estaba en el recibidor, felicitándoles por lo bien que tenían la instalación, y agradeciendo su cooperación. Más tarde se dieron cuenta que del cajón de la mesilla de noche había desaparecido el dinero de la pensión, que el día anterior habían sacado del banco.

Tampoco vale que te enseñen un carné, que puede ser falso, o te digan que llames al número de teléfono que consta en el mismo, y que te ratifica un compinche del timador.

A mi madre la engañaron dos veces unos falsos revisores de Gas butano.