Muchas personas mayores se sienten obligados a cambiar de entorno urbano cuando llega la vejez. Los hijos que en muchos casos han cambiado su domicilio del pueblo a la gran ciudad buscando una mejoría de vida, obligan el traslado de los progenitores para darles una mejor atención en su vejez a la par que obtienen mejor asistencia sanitaria.
Pero es importante que el mayor no se vea aprisionado en su nueva morada, y para ello es imprescindible que el entorno urbano sea favorable.
Vivir en una zona urbana en la que es fácil salir a caminar, donde hay abundancia de comercios de barrio o se puede llevar a los niños al colegio andando o en bicicleta, puede ser una buena receta para controlar la obesidad y la diabetes. Cada vez son más los estudios que demuestran la influencia del entorno urbano en nuestra salud. Los barrios más caminables se asocian con una reducción del 7% de la incidencia de diabetes al cabo de 10 años y una disminución de las tasas de obesidad de casi el 10% en el mismo periodo.
En contraposición, los barrios con menos facilidades para salir a caminar, la diabetes y la obesidad se incrementaron en el mismo periodo una tasa del 6% y el 13%, respectivamente.
Según han explicado en alguna ocasión, la definición de un barrio favorable al ejercicio físico integra elementos como la presencia de zonas verdes, escuelas, comercios locales (especialmente donde adquirir frutas, verduras y otros productos frescos), espacios públicos recreativos o centros de salud.
Como sociedad hemos desterrado mayoritariamente la actividad física de nuestras vidas, mientras que cada oportunidad que tengamos para ir a la tienda de la esquina, llevar a los niños andando al colegio o sacar al perro a pasear puede estar influyendo en nuestro riesgo de desarrollar diabetes o sobrepeso".
Cada vez más investigaciones ahondan en esta relación entre la salud y el entorno físico en el que vivimos. Algunos estudios, por ejemplo, han demostrado que vivir cerca de áreas verdes mejora parámetros como la ansiedad, la calidad de sueño o la tasa de partos prematuros.
Todo esto está muy bien sobre el papel, sin embargo es muy difícil conseguir la vivienda en el sitio adecuado, por lo que si la persona no es constante seguramente será propenso a padecer o incrementar algún tipo de trastorno. Yo no soy rutinario, pero de vez en cuando paseo, trabajo y me muevo más de la cuenta, como voy a hacer este fin de semana por el Pirineo.
ResponderEliminarA eso le llamo "oxigenarse", imprescindible ara continuar. Buen finde.
EliminarVivir cerca de zonas verdes, es bueno para los mayores y para los niños, los del medio intentan que al llegar el fin de semana todos puedan acercarse y disfrutar del campo. Los mayores son gente recia y se adaptan a todo, pero si les mejoramos un poco la situación tanto mejor. Abrazos
ResponderEliminarTodos no pueden elegir libremente por circunstancias muy diversas, pero si se nos puede favorecer hay que intentarlo.
EliminarAunque siempre es más atractivo estar rodeado de naturalza para hacer ejercicio, en realidad no importa el entorno para salir a caminar y moverse. El placer de andar supera cualquier paisaje.
ResponderEliminar¡Buen fin de semana!
Así es Mercedes, tienen buen espíritu. Bss
EliminarHola Marcos
ResponderEliminarEstupendo Post.
Yo aunque vivo en la ciudad, estoy en una zona tranquila en el Barrio de la Luz, junto al nuevo cauce del rio Turia.
Saludos cordiales, Montserrat
Una zona muy tranquila. Solo para algunos, el ruido del tráfico de la V-30. Bss
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