Cada día que vivimos tomamos
infinidad de decisiones. Unas acertadas y tras no tanto pero todas ellas van
configurando nuestro presente y futuro.
No solo es cuestión de suerte sino de
nuestra propia elección.
Decidimos y aplicamos lo de “Alea jacta est”, y añado,
Dios proveerá…
Cayo Suetonio, en su gran
obra “Vitae Caesarum”, narra la vida de los gobernantes de Roma, desde Julio
Cesar hasta Domiciano, y fue quien atribuye a Julio Cesar dicha frase
justamente cuando cruzaba el rio Rubicon,
que hacía de frontera entre Italia y la Galia, y con ello comenzando la guerra
civil contra los entonces cónsules de Roma, y que ganó Cesar. (49 a.C.)
La Ley romana prohibía a los
generales entrar a Roma con su ejército, bajo pena de muerte, pero Julio Cesar
que venía triunfador de la Guerra de las Galias, tomó su decisión.
La traducción popular. “La
suerte está echada” no es literal, ya que lo correcto sería. “los dados están lanzados”,
en lenguaje popular romano, cuya afición a lanzar los dados era notable, mas
bien su juego preferido.
Hay quien atribuye la frase
a Plutarco, según el libro de “Historias de Asinio Polion”, quien comentaba había
oído decirlo a Julio en el momento del cruce.
De cualquier modo, piensa
antes de tomar decisiones apresuradas.
Hace cuatro años tomé la decisión equivocada.
Hace cuatro años tomé la decisión equivocada.
En la vida tenemos que tomar continuamente decisiones, unas acertadas y otras no tanto, pero siempre hay alguna que nos marca fuertemente en nuestra vida.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hay algunas tan sumamente importantes que merecen estudiarlas con la mayor atención y serenidad. Si te pasa ésto luego elige cara en la moneda.
EliminarDe vez en cuando pensamos "Si yo hubiera hecho esto...", en este caso seguro que la decisión que tomamos vista años después no fue la correcta, pero había que tomarla y entonces decidimos que lo más conveniente era lo que pensamos.
ResponderEliminarEn cierta ocasión en la empresa donde trabajaba, me insinuaron algo muy concreto, si lo hubiera hecho, me hubiera jubilado como director general de un departamento, pensándolo posteriormente nunca he pensado que tomara la decisión equivocada, simplemente tomé la más cómoda para mi. Y no añoro la determinación que entonces tomé.
Seguramente este no es tu caso, pero piensa que la decisión que tomaste hace cuatro años, era la mejor para ti en aquella época.
Tengo un amigo alto directivo de un banco al que le plantearon involucrarse también por las tardes, con su recompensa económica, y renuncio por atender su pequeño huerto de hortalizas. Lo ganó en salud, sin duda.
EliminarDecisiones equivocadas tomamos todos, pero en esta vida las cosas son como son, no como queremos que sean. Hay que vivir el presente del mejor modo posible, porque el pasado ya no vuelve y el futuro no existe. Personalmente siempre pienso que "mañana será otro hoy", por eso hay que vivir el día a día felizmente, y no castigarnos pensando en los errores cometidos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Los cuatro años han pasado y los he disfrutado. Nunca sabremos si mañana al salir nos caera una maceta. Saludos.
EliminarSi fuéramos videntes, sabríamos qué es lo mejor para nosotros en cada momento. Pero la vida es así, debemos asumir los riesgos en cada decisión que tomemos, y seguro que no sería tan equivocada esa decisión que tomaste. Abrazos
ResponderEliminarComo todo, tuvo su parte buena, disfrute de cosas ahora prohibidas.
EliminarEn un mundo en que decidimos cada día sobre mil cosas, no es extraño, estimado Marcos, tomar rumbos equivocados, algunos sin mayor importancia, otros trascendentales. Así nos pasamos la vida. Pero en cualquier caso, si creímos en su momento que la del error iba a ser la correcta, nada sacamos con amargarnos. Nos pasa a todos.
ResponderEliminarTienes razón. Lo lamento por lo que me atañe, pero he disfrutado de cuatro años de calidad e vida, que se habrían perdido.
EliminarCiertisimo. Se dice que a los errores les llamamos “experiencia “ porque uno aprende a base de los errores cometidos. En resumidas cuentas, que parece, visto lo visto, que mi “experiencia “ ha acabado siendo la mar de profusa, ja ja. Será la acumulación de años, prefiero pensar!
ResponderEliminarY quien no tenemos esa "experiencia", pero algunas marcan nuestro futuro.
ResponderEliminarEs difícil casi siempre tomar decisiones.
ResponderEliminarNunca se sabe cuál puede ser el camino más acertado.
Si nos equivocamos, hay que aceptarlo y no perder la ilusión.
Un abrazo.
Pero hemos de reconocerlo para ser mas cautos y no repetirlos.
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